El número π, no sólo aparece en matemáticas cuando se habla de círculos o esferas, su presencia en relaciones numéricas, en el cálculo de probabilidades y hasta en estudios estadísticos la confieren una omnipresencia casi mágica. Se repasa la historia de π, desde el que es considerado el padre, Arquímedes, hasta Ramanujan, un joven indio sin formación universitaria quien descubrió nuevas series infinitas para obtener valores aproximados de π, todavía utilizadas por las supercomputadoras para obtener millones de cifras de este familiar y extraño número.